Ayer, como en cada ronda de medicación (en este caso, aunque no tenga mayor importancia, la de las 8 de la tarde), entré en una de las muchas habitaciones para pinchar una heparina a uno de los muchos pacientes. Pero este era diferente, y a decir verdad, un poco especial.
Nada más entrar en dicha habitación el hombre en cuestión miró desafiante la jeringa que llevaba en mano: "¿Eso es para mi?". Cuando te hacen esa pregunta ya estremeces porque sabes que no será fácil. "Sí, es para usted, hay que poner la pincha en la barriga", dices tú con la mayor dulzura y educación del mundo mundial, así como si le fueses a transmitir ánimo por decirlo de esta manera. "¿Y me vas a pinchar tú?", otra de las preguntas que más odiamos los de prácticas, siempre pensamos 'Siiiii, le voy a pinchar yo, y qué, lo hago superbien!', cosa que evidentemente nunca decimos. "Sí Ramón, le voy a pinchar yo", "Vale vale vale, pues te voy a dar unas instrucciones". Whaaaat...? Me va a dar instrucciones, pongamos atención en lo que dice que esto seguramente valga para hacer una entrada del blog, suena interesante. "Me tienes que pellizcar tan fuerte que no note el pinchazo, por favor, clávame las uñas, aprieta como si te fuese la vida en ello, pellízcame como si estuvieses matando a tu suegra (obsérvese el aprecio que debe tener este señor a la pobre de su familiar), por favor te lo pido, por favor por favor, lastímame mucho, tu por eso no te preocupes, pero que no note el pinchazo". Y tú con una cara de tonta y de risa intentado no salir a la luz, te atreves a preguntarle: "¿Pero tanto le duele?", "¡No, es que me da grima!" Bueno... pues que no sea por pellizcar.
Agarré con ganas la barriguilla del señor, y soltó un: "Así así así muy bien muy bien muy bien", que aquello parecía un teatro de drama más que el pinchazo de una heparina, y clavé la aguja mientras se estremecía y cerraba los ojos con la fuerza de todo su ser. "Ale ya está, ¿fue para tanto?" "De maravilla lo hiciste, qué bien pellizcas, la mejor de todas!" Bueno anda, yo que llevo años intentando buscar mi habilidad (por eso de que se dice que todo el mundo tiene una), y ahora me encuentro que aún va a ser pellizcar, muy teatreros son algunos pacientes...